domingo, 14 de septiembre de 2008

CLIMA

Caían ya chuzos de punta y el maestro miraba con asombro la ventana que tenía justo enfrente.
Oía aquel monótono y sempiterno run-run que rebotaba contra los cristales y que desde hacía semanas había ya olvidado.
Alguien levantó un poco más la voz para hacerse oír a pesar que estaban solo a mediados de septiembre.
Pensó que además aquella sala era demasiado pequeña para tanta gente y que el ambiente siempre agobiaba. Encima
, no le dejaban hablar de sus proyectos.
Notó que la tensión eléctrica avisaba que se acercaba una buena tormenta, aunque a nadie parecía importarle. Se dijo que era raro que el clima se modificara tan pronto después del verano. Lo normal era en torno a diciembre o así. Sonrió al pensar que aquello tan manido del cambio climático también les había alcanzado.
Alguien se levantó sacándole del ensimismamiento al dar un golpe cerrando la ventana bruscamente y le echó en cara su sonrisa. Aquello le llegó al alma pues pareció certificar definitivamente el fin de sus vacaciones.
Hoy le tocaría esperar que escampase si no quería ponerse malo desde el principio.
Caían ya chuzos de punta y arreció la tormenta en aquella primera reunión de curso con sus compañeros. Se estropeó el tiempo –dijo.